Adoración por el cuerpo, adoración por el papa en Lourdes y los de los cuatro petardos.

Muy mal que se adore a la gimnasia de chicle de Atenas, muy mal que haya quien sólo piense en tener unos pechos nuevos, muy mal en que sólo importe el exterior, pero NUNCA la contraposición, desde mi humilde punto de vista, está en el fanatismo religioso.
Intentaré hacer pensar un poquito y hacer una exposición dinámica y entretenida. Soy la lagartija: Aquí planteo una situación compleja. Hoy domingo he visto que mucha gente ha ido a ver al Ayatolá Papa Frita en Lourdes (El Papa es aquello que se parece a 3p0 de starwars, que no se le entiende y que está muy impedido). Me da tanto pánico el ver esas imágenes de devoción como pánico me dieron ver las imágnes del 11M. Creo es muy horrible que haya tanto ultracatólico talibán en España y en Francia. No es que sea religionfobo, es que soy violentofobo, es que soy terroristafobo, es que soy terrorismofobo. En Cantabria y Asturias diciendo que van en boca de Eta están poniendo unos artefactos echos de cuatro petardos y todos nos alarmamos (y efectivamente es para alarmarse), pero más alarma me hace ver lo de Lourdes.
Quizás sea una gente que necesita creer en algo y apartarse de la adoración del cuerpo, la secualarización de la sociedad, la falta de valores. Pero para eso no es bueno hacer violencia, ni terrorismo y lo de Lourdes es el paso previo. Como el paso previo en las sedes religiosas de Iraq.
Y más vueltas doy a todo esto: No es que la religión sea el problema del terrorismo, el problema son una serie de intereses (el amo del perro) que ven como un gran útil a la religión fanática (católica, musulmana,....) (el perro). Yo no soy una oveja, ¿y tú? Bueno, puede que sí sea oveja pa algunas cosas, pero no para tragarme los chicles de las olimpiadas ni los chicles de que entre la religión y la guerra-violencia-terrorismo no hay relación alguna.